¡Viernes exclusiva! Todo lo ud. siempre quiso saber de los gatoides y no se atrevió a preguntar
interestelar

BENDITO SEAS KUBRICK QUE ESTAS EN LOS CIELOS
Es la película del momento, que se presenta como candidato a los oscars anunnaki, pero está causando estupefacción, pero no por que esté bien hecha, sino por otros muchos motivos bien distintos.
Algunas críticas la señalan como la decepción -truño del año, junto con otro panfleto,The Interview. Son 169 minutos de sufrimiento masoquil, donde no sólo te acuerdas con rabia e irritación hispana en la madre del director, Christopher Nolan, sino -y lo que es más importante- en Kubrick y la santísima Mamá que le trajo al mundo para hacer genialidades cósmicas con maquetas en un época de la infancia de los efectos.
Contemplando los sosos paisajes estelares sin música de Nolan es imposible no acordarse de la sublime serenidad de los horizontes cósmicos plasmados por Kubrick en 2001 al ritmo magistral del valls de Strauss. O el mismo silencio espacial o la respiración del astronauta en la soledad silenciosa del Infinito. Nolan es un matao y no le saca estética al paisaje interestalar. Las naves parecen carromatos de la serie Torrente para ir a la romería del Rocío, cascados y viejos de estar aparcados todo el año en una cuneta de Camas (Sevilla). Desde luego la productora parece de la Junta de Andalucía de Sevilla, que ya fallan hasta para dar las campanadas de nochevieja como ocurrió en 2014.
Los trajes espaciales están sucios, son tópicos y todo es visualmente predecible y ñoño. Interestellar engrandece al grandioso 2001 del Demiurgo Kubrick, una película universal y sin apenas diálogos en el el 60% del metraje que muestra la diferencia entre un genio y un monigote panfletista mkultra al servicio de los illuminati, Christopher Nolan, con su productora Síncope, que significa “pérdida de conciencia”.
Kubrick en el 1969 lo bordó y Nolan en 2014 la cagó. Cuando falta media hora para el final, el espectador se retrepa inquieto en su asiento, da un manotazo a la bolsa de palomitas y masculla:
LUIS CARLOS CAMPOS - PERIODISTA CRITICO ESPAÑOL